Parece que el próximo año 2008 se avecina con importantes subidas en los
precios de determinados productos de primera necesidad, de ahí que sea
importante prevenir, y trazar una estrategia para sufragar gastos.
-Lo principal a la hora de ahorrar es ser perfectamente consciente del dinero
del que se dispone, de los recursos que se necesitan y qué tipo de inversión se
ajusta más a nuestra situación.
-Ayuda enormemente crearse un plan que sea fácil de seguir y realista, de forma
que pueda hacerse efectivo. Es importante llevar un orden exhaustivo para
ponerlo en práctica con éxito.
-Un control al milímetro de los gastos asociados a la/s tarjeta/s de crédito
puede ser un método eficaz para ahorrar dinero. Marcarse un tope de gasto y
amortizar el balance de la/s tarjeta/s es una estrategia factible.
-Otra opción interesante puede ser abrir una cuenta de ahorro. No es importante
cuánto dinero depositemos en ella mes a mes, pero si ser constantes. Aunque las
cantidades no sean monumentales, al cabo del año es un dinero que habremos
salvado.
-Es muy importante que cuando empecemos con nuestro plan, realicemos un registro
milimétrico de todos los gastos mensuales. Sólo así podremos tener una visión
global de nuestra dinámica, ideal para ver en qué actividades debemos pasar la
tijera.
-En casa, es muy fácil reducir los gastos con pequeños gestos. Debemos ser
prudentes a la hora de desconectar todos los aparatos eléctricos después de su
uso. Apagar todos los pilotos es un acto que, aunque a priori insignificante,
nos ahorrará dinero al cabo del año.
-Lo mismo ocurre con la luz y el gas. Con una simple llamada, nuestras compañías
nos informarán de qué franjas horarias resultan más rentables a nivel de
tarifas. Es tan fácil como utilizar lavadoras, lavaplatos y demás
electrodomésticos fuera de esas horas.
-El teléfono es otra fuente de gastos importante. Un control exacto de las
llamadas realizadas y una buena información de tarifas, debe servirnos para
conformar un plan de llamadas que nos ayude a recortar gastos.
- A la hora de hacer la compra, ir un día por semana para evitar la compra de
artículos caprichosos, además de fijarse en las ofertas que semana a semana
invaden las estanterías de los supermercados.
Fuente:
http://es.biz.yahoo.com/071204/193/5tc29.html